Leche Frita | perfecta trucos y receta infalible

Detalles

Porciones

4-5 personas

Prep tiempo

15 minutos

Reposo tiempo

1 hora

Tiempo Total

1 hora y 15 minutos

Precio

4-5 euros

Calorias

210 kcal

Leche Frita es un postre tradicional de España, caracterizado por su textura crujiente por fuera y suave por dentro. Esta delicia, elaborada a base de leche, harina y azúcar, ofrece una experiencia irresistible con cada bocado. El aroma a canela y la dulzura equilibrada la convierten en una opción perfecta para los amantes de los postres caseros. Además de su sabor inigualable, la Leche Frita es una fuente de energía rápida y una opción ideal para consentirse en cualquier momento del día. Su historia se remonta a la cocina conventual de Castilla y León, donde se preparaba como un manjar especial. Esta receta se clasifica como un snack o postre, perfecta para acompañar el café de la tarde o compartir en reuniones familiares.

Ingredientes

  • 500 ml de leche entera

  • 100 g de azúcar

  • 50 g de maicena

  • 1 rama de canela

  • Piel de un limón (sin la parte blanca)

  • 1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional)

  • 2 yemas de huevo

  • 50 g de harina de trigo (para rebozar)

  • 1 huevo batido (para rebozar)

  • Pan rallado (para rebozar)

  • Aceite de girasol (para freír)

  • Azúcar y canela en polvo (para espolvorear)

  • Cazo mediano
  • Batidor de varillas
  • Molde cuadrado o rectangular
  • Papel film
  • Cuchillo
  • Sartén honda
  • Espumadera
  • Plato con papel absorbente
  • Recipientes para rebozar

Instrucciones

  • Infusionar la leche: En un cazo, calentar la leche con la rama de canela y la piel de limón hasta que empiece a hervir. Retirar del fuego y dejar reposar 10 minutos. Colar para eliminar la canela y el limón.
  • Preparar la mezcla: Disolver la maicena en un poco de leche fría. En otro bol, batir las yemas de huevo con el azúcar hasta que blanqueen. Agregar la leche con maicena y mezclar bien.
  • Cocinar la crema: Verter la mezcla anterior en la leche caliente y cocinar a fuego medio sin dejar de remover hasta que espese.
  • Refrigerar: Verter la crema en un molde forrado con papel film y alisar la superficie. Cubrir con otro film para evitar que se forme costra. Refrigerar por al menos 4 horas.
  • Cortar y rebozar: Cortar la masa en cuadrados o rectángulos. Pasar cada porción por harina, huevo batido y pan rallado.
  • Freír: Calentar abundante aceite en una sartén y freír los trozos hasta que estén dorados por ambos lados. Escurrir sobre papel absorbente.
  • Espolvorear y servir: Mezclar azúcar con canela en polvo y espolvorear sobre la leche frita caliente. Servir templada o fría.
Calorías210 kcal
Proteínas5 g
Grasas9 g
Carbohidratos28 g
  • Usa leche entera de buena calidad: Para obtener una textura cremosa y un sabor más intenso, utiliza leche entera fresca. Evita las versiones desnatadas o semidesnatadas, ya que pueden afectar la consistencia de la crema.
  • Cuece la mezcla a fuego medio y remueve constantemente: La clave para evitar grumos en la masa es cocinarla a fuego medio y remover sin parar con una varilla o cuchara de madera. Así lograrás una textura suave y homogénea.
  • Deja que la masa repose bien antes de cortarla: Una vez que la mezcla esté cocida, viértela en un molde y deja que repose en la nevera al menos 4 horas, o mejor aún, toda la noche. Esto ayudará a que la masa se endurezca y facilite el corte.
  • Corta en porciones iguales y de buen tamaño: Para que la fritura sea uniforme, corta la masa en porciones del mismo tamaño, preferiblemente en cuadrados o rectángulos de unos 4-5 cm de lado. Esto asegurará una cocción pareja.
  • Empanizado doble para una textura crujiente: Para obtener una cobertura crujiente, pasa los trozos de masa primero por harina y luego por huevo batido. Si quieres un rebozado más firme, puedes repetir el proceso una segunda vez.
  • Aceite bien caliente, pero sin quemarse: La temperatura del aceite es clave. Debe estar caliente (alrededor de 180°C), pero no humeante, para que la Leche Frita se dore rápidamente sin absorber demasiado aceite.
  • Reboza con azúcar y canela inmediatamente después de freír: Para que el azúcar y la canela se adhieran bien, espolvorea la mezcla sobre la Leche Frita recién salida de la sartén y aún caliente. Esto realzará su sabor y le dará un acabado perfecto.
  • Helado de vainilla o nata: La combinación de la calidez de la Leche Frita con la cremosidad y frescura del helado crea un contraste de temperaturas y texturas irresistible.
  • Miel o sirope de arce: Un ligero toque de miel o sirope de arce potenciará el dulzor del postre sin opacar su sabor original, aportando una nota especial.
  • Frutas frescas o en compota: Las frutas ácidas, como las fresas, las frambuesas o la compota de manzana, equilibran el dulzor de la Leche Frita y añaden un toque refrescante.
  • Chocolate caliente o crema de cacao: Sumergir un trozo de Leche Frita en chocolate derretido es una experiencia deliciosa. También puedes acompañarla con crema de avellanas para un toque más indulgente.
  • Café o licor dulce: Un café solo o un licor dulce como el anís o el licor de hierbas marida perfectamente con la Leche Frita, resaltando su sabor tradicional.
  • Nata montada casera:Una cucharada de nata montada sin azúcar en exceso le dará un toque de suavidad sin hacer que el postre sea demasiado empalagoso.
  • Espolvoreado de coco rallado o almendras tostadas: Para darle un toque diferente y crujiente, prueba espolvorear un poco de coco rallado o almendras tostadas picadas antes de servir.
  • Deja enfriar completamente antes de guardar: No guardes la Leche Frita cuando aún esté caliente, ya que el vapor atrapado puede hacer que se vuelva blanda. Déjala enfriar completamente a temperatura ambiente antes de almacenarla.
  • Usa un recipiente hermético: Para evitar que absorba olores del refrigerador y mantener su frescura, guárdala en un recipiente hermético con tapa bien sellada.
  • Separa las capas con papel encerado: Si necesitas apilar varias piezas de Leche Frita en el mismo recipiente, coloca papel encerado entre ellas para evitar que se peguen.
  • Consérvala en el refrigerador por un máximo de 3 días: La Leche Frita casera no contiene conservantes, por lo que es recomendable consumirla en un plazo de 2 a 3 días para disfrutarla en su mejor estado.
  • Recalentar en la sartén para recuperar la textura: Para que vuelva a estar crujiente, calienta los trozos en una sartén a fuego medio sin añadir aceite adicional. También puedes usar el horno a 180°C durante unos minutos.
  • No se recomienda congelar: La congelación altera la textura de la Leche Frita, haciendo que se vuelva más blanda y pierda su cremosidad al descongelarse.
  • Alternativa: reutilizar en otro postre: Si sobra Leche Frita y no quieres desperdiciarla, puedes usarla en un batido, triturarla como base de un pastel o incluso como relleno de crepes.

PREGUNTAS FRECUENTES (FAQs)

Sí, puedes sustituir la harina de trigo por harina de maíz o harina de arroz en la preparación de la masa. Para el rebozado, usa harina sin gluten y asegúrate de que todos los ingredientes sean aptos para celíacos.

La leche entera es la mejor opción, ya que aporta una textura más cremosa y un sabor más intenso. También puedes usar leche sin lactosa si tienes intolerancia.

Sí, aunque la textura será diferente. Para hornearla, colócala en una bandeja con papel de horno, píntala con un poco de mantequilla derretida y hornea a 200°C durante unos 15 minutos o hasta que esté dorada.

Es clave que el aceite esté bien caliente (alrededor de 180°C). Además, evita freír muchas piezas a la vez, ya que esto puede bajar la temperatura del aceite y hacer que absorban más grasa.

  • Para descargar la receta, puede hacer clic en descargar en el archivo PDF a continuación.

Deja un comentario