Fabada Asturiana | Guiso clásico para días fríos

Detalles

Porciones

4-5 persona

Prep tiempo

10 minutos

Coccion tiempo

2:50

Tiempo Total

3 horas

Precio

5-8 euros

Calorias

400 kcal

La Fabada Asturiana es uno de los platos tradicionales más famosos de la región de Asturias en España. Es una sopa rica de alubias blancas cocidas suavemente con carnes ahumadas como el chorizo y el cordero, lo que le otorga un sabor distintivo y una profundidad en el gusto. Durante la preparación de la Fabada Asturiana, el aroma de las hierbas y especias se infiltra en la cocina, creando un ambiente cálido y acogedor que te hace ansiar probarla.
Los beneficios de la Fabada Asturiana son muchos; proporciona energía y una sensación de saciedad y confort. Además, contiene nutrientes útiles como fibra y proteínas.
La historia de la Fabada Asturiana se remonta al siglo XVI en la región de Asturias, al norte de España, donde se preparaba con productos locales simples y, con el tiempo, se convirtió en un símbolo cultural de la gastronomía asturiana. Este plato se sirve principalmente como plato principal en las comidas almuerzo.

Ingredientes

  • 500 g de alubias blancas secas

  • 200 g de jamón o tocino ahumado

  • 200 g de chorizo

  • 200 g de morcilla

  • 1 cebolla grande, picada

  • 4 dientes de ajo, machacados

  • 1 hoja de laurel

  • 1 cucharadita de pimentón ahumado

  • Sal y pimienta al gusto

  • Agua para cocinar (aproximadamente dos litros)

  • Olla grande para cocer
  • Cuchara de madera para remover
  • Cuchillo para cortar
  • Tabla de cortar

Instrucciones

  • Remojar las alubias: Coloca las alubias blancas en un bol grande y cúbrelas con agua. Déjalas en remojo al menos 12 horas o toda la noche.
  • Preparar la olla: Al día siguiente, coloca las alubias en una olla grande y agrega dos litros de agua.
  • Añadir las carnes: Agrega el jamón ahumado, el chorizo y la morcilla a la olla junto con las alubias, y deja que hierva a fuego medio.
  • Incorporar los sabores: Añade la cebolla picada, los ajos machacados, la hoja de laurel y el pimentón ahumado. Remueve bien para que los sabores se mezclen.
  • Cocinar a fuego lento: Baja el fuego y deja que la fabada se cocine a fuego lento durante unas dos horas, removiendo de vez en cuando y retirando la espuma que se forma en la superficie.
  • Ajustar el condimento: Añade sal y pimienta al gusto unos 15 minutos antes de finalizar la cocción. Asegúrate de que las alubias estén tiernas y el caldo espeso.
Calorías400 kcal
Proteínas20 g
Grasas15 g
Carbohidratos35 g
Fibra10 g
  • Usa ingredientes de calidad : La base de una buena fabada asturiana está en los ingredientes. Elige alubias de calidad y embutidos asturianos auténticos como el chorizo y la morcilla. Estos ingredientes aportan el sabor característico que define este plato.
  • No apresures la cocción : Es importante cocinar la fabada a fuego lento. La cocción prolongada a baja temperatura permite que los sabores se mezclen perfectamente y que las alubias se ablanden de manera uniforme.
  • Remoja las alubias antes de cocinarlas : Deja las alubias en remojo al menos 12 horas antes de prepararlas. Esto no solo reduce el tiempo de cocción, sino que también ayuda a que las alubias se cocinen más fácilmente y sean más digestivas.
  • Usa caldo casero : El caldo que uses para la fabada es crucial. Si es posible, utiliza un caldo casero o de buena calidad. Esto mejorará el sabor final del plato. Si lo deseas, puedes hacer un caldo de jamón o de huesos de cerdo para darle un toque más profundo.
  • Controla el punto de sal : Aunque los embutidos aportan sal al plato, es importante probar la fabada antes de servirla y ajustar la cantidad de sal al gusto. Es fácil pasarse con la sal, por lo que es recomendable añadirla poco a poco.
  • Descansa la fabada : Una vez que el plato esté listo, deja reposar la fabada durante 10-15 minutos antes de servirla. Esto permite que los sabores se asienten y el plato se enfríe un poco, lo que mejora su textura y sabor.
  • Servir caliente : La fabada asturiana se disfruta mucho más cuando se sirve caliente. Asegúrate de recalentar bien el plato antes de comerlo si has hecho una gran cantidad para disfrutar plenamente de su sabor.
  • Panes rústicos : El pan es imprescindible para acompañar la fabada asturiana. Elige un pan rústico de buena calidad para mojar en el caldo y aprovechar todo el sabor del plato.
  • Ensalada fresca : Para equilibrar la contundencia de la fabada, una ensalada verde fresca con tomate, cebolla y aceitunas es un excelente acompañante. Esto aporta frescura y contraste al plato.
  • Vino tinto asturiano : El vino tinto de la región asturiana, como el vino de la Denominación de Origen Cangas, es un acompañante perfecto para la fabada. Su sabor robusto complementa bien los sabores ricos y sabrosos del guiso.
  • Queso asturiano : El queso de Cabrales es un excelente acompañante para la fabada. Su sabor fuerte y cremoso contrasta bien con la suavidad del plato y es típico de la región asturiana.
  • Tortilla española : Para aquellos que prefieren un segundo acompañante, la tortilla española es un clásico que va muy bien con la fabada. Su suavidad y sabor suave ayudan a equilibrar los sabores intensos del guiso.
  • Pimientos de piquillo : Los pimientos de piquillo asados son un acompañamiento ligero y sabroso para la fabada. Su sabor dulce y suave resalta muy bien con la intensidad del plato principal.
  • Arroz blanco : Si prefieres acompañar la fabada con algo más neutro, un arroz blanco es una opción sencilla que no sobrecarga el sabor, pero complementa bien el guiso.
  • Dejar enfriar antes de almacenar : Es importante dejar que la fabada se enfríe completamente antes de guardarla. Esto evita la proliferación de bacterias y asegura que se conserve correctamente.
  • Guardar en recipientes herméticos : Utiliza recipientes herméticos para almacenar las sobras. Esto ayudará a mantener el sabor y la frescura de la fabada durante más tiempo.
  • Refrigerar rápidamente : Coloca las sobras en la nevera lo antes posible, idealmente dentro de dos horas después de haber cocinado la fabada. Las temperaturas frías ayudan a mantener la seguridad alimentaria.
  • Conservar hasta 3 días : Las sobras de la fabada pueden conservarse en la nevera hasta 3 días. Después de este tiempo, el plato podría perder sabor y frescura, por lo que es mejor consumirlo dentro de ese periodo.
  • Congelar para almacenamiento prolongado : Si no puedes consumir la fabada en pocos días, también puedes congelarla. Asegúrate de dividir la fabada en porciones antes de congelarla para que sea más fácil descongelar solo lo que vayas a utilizar.
  • Descongelar correctamente : Cuando decidas comer la fabada nuevamente, descongélala en el refrigerador durante la noche o utiliza el microondas para descongelar de manera segura.
  • Recalentar bien antes de servir : Asegúrate de recalentar bien la fabada antes de comerla, asegurándote de que esté completamente caliente. Esto no solo mejora su sabor, sino que también es importante desde el punto de vista de la seguridad alimentaria.

Preguntas Frecuentes (FAQs)

Las alubias deben estar suaves y tiernas. Si las alubias aún están duras, continúa cocinándolas a fuego lento hasta que alcancen la textura deseada. Asegúrate de no añadir sal hasta que las alubias estén cocidas, ya que esto puede endurecerlas.

Aunque las alubias frescas son la opción tradicional, puedes usar alubias enlatadas si tienes poco tiempo. Sin embargo, el sabor será menos profundo que si usas alubias secas cocinadas lentamente.

Sí, la olla de presión puede acelerar el proceso de cocción. Sin embargo, debes tener cuidado de no sobrecocinar los ingredientes y de ajustar el tiempo de cocción según el tipo de alubias que estés usando.

Aunque la fabada tradicional se hace con chorizo y morcilla, puedes experimentar con otros tipos de carne, como tocino o costillas, para darle un giro al plato. Sin embargo, estos cambios alterarán el sabor original de la receta.

  • Para descargar la receta, puede hacer clic en descargar en el archivo PDF a continuación.

Deja un comentario