Croissants Caseros | Sabor y Textura Inigualables

Detalles

Porciones

4-6 persona

Prep tiempo

2 horas

Coccion tiempo

20 minutos

Tiempo Total

2:20

Precio

5-6 euros

Calorias

300 kcal

La receta de Croissants Caseros es una experiencia única que te hará disfrutar al preparar deliciosos y crujientes pasteles desde cero. El croissant se caracteriza por su textura hojaldrada y su rico sabor a mantequilla, lo que lo convierte en la opción perfecta para un delicioso desayuno o una merienda refrescante. Los Croissants Caseros ofrecen una combinación excelente de capas ligeras y homogéneas, brindándote una sensación de satisfacción en cada bocado, especialmente cuando están frescos.

Entre los beneficios de los croissants caseros se destaca su contenido de grasas debido a la mantequilla utilizada, pero también proporcionan una alta energía y contienen algunas vitaminas y minerales, como la vitamina B, además de proteínas provenientes de la harina. Se pueden disfrutar con moderación para obtener un placer saludable en cada comida.

El origen del croissant se remonta a Francia, donde se popularizó en el siglo XIX y se convirtió en un símbolo de la repostería francesa clásica. Es famoso por su diseño en forma de media luna y sus capas finas formadas por el plegado de la masa con mantequilla.El croissant casero también es una opción ideal para un desayuno delicioso y puede ser servido como una merienda entre comidas.

Ingredientes

  • 500 g de harina de uso común

  • 250 g de mantequilla fría

  • 60 g de azúcar

  • 10 g de sal

  • 15 g de levadura instantánea

  • 300 ml de agua tibia

  • 1 huevo para pintar

  • Un bol grande
  • Una superficie limpia para trabajar la masa
  • Un rodillo
  • Papel para hornear
  • Una bandeja para hornear
  • Una brocha para pintar los croissants

PASOS PARA PREPARAR LA RECETA DE CROISSANTS CASEROS

Instrucciones

  • Preparación de la masa: En un bol grande, mezcla la harina, el azúcar, la sal y la levadura. Agrega el agua tibia poco a poco y amasa hasta obtener una masa suave y homogénea. Deja reposar la masa durante 30 minutos.
  • Preparar la mantequilla para el hojaldre: Coloca la mantequilla entre dos hojas de papel de hornear y aplánala con el rodillo hasta obtener un rectángulo delgado. Refrigera para que se mantenga fría.
  • Incorporar la mantequilla en la masa: Estira la masa sobre una superficie enharinada en forma de rectángulo. Coloca la mantequilla fría en el centro y dobla la masa sobre ella, luego estírala suavemente.
  • Doblar la masa: Pliega la masa en forma de tríptico (como doblando una carta) y repite el proceso de doblado y estirado tres veces, dejando que la masa repose en la nevera durante 20 minutos entre cada doblez.
  • Formar los croissants: Después del último doblez, estira la masa en forma de rectángulo y córtala en triángulos. Enrolla cada triángulo para formar el croissant y asegúrate de sellar bien el extremo.
  • Última fermentación: Coloca los croissants en una bandeja cubierta con papel para hornear y deja reposar durante 45 minutos para que fermenten y aumenten su tamaño.
  • Horneado: Precalienta el horno a 180°C. Pinta los croissants con huevo batido y hornéalos durante 15-20 minutos, o hasta que estén dorados y crujientes.
Calorías300 kcal
Carbohidratos30 g
Grasas15 g
Proteínas5 g
  • Usa ingredientes de alta calidad: La mantequilla es clave para obtener un sabor auténtico y una textura hojaldrada. Elige mantequilla con un alto contenido de grasa, preferiblemente europea, para un mejor resultado.
  • Mantén la masa fría durante el proceso: Trabaja la masa en un ambiente fresco y refrigérala entre cada paso. Esto evita que la mantequilla se derrita y asegura que los croissants tengan sus capas distintivas.
  • Respeta los tiempos de reposo y levado: No apresures los tiempos de reposo. La masa necesita suficiente tiempo para desarrollar su textura hojaldrada y su sabor característico.
  • Extiende la masa de manera uniforme: Al laminar la masa, asegúrate de que el grosor sea uniforme. Esto garantiza un horneado parejo y una apariencia profesional.
  • Sella bien las puntas al formar los croissants: Enrolla los triángulos de masa de manera firme y asegúrate de que las puntas estén bien selladas para evitar que se abran durante el horneado.
  • Cepilla con huevo para un acabado dorado: Antes de hornear, aplica una capa de huevo batido sobre los croissants. Esto les dará un color dorado brillante y una textura crujiente.
  • Hornea a la temperatura adecuada: Precalienta el horno a 200 °C y reduce ligeramente la temperatura al introducir los croissants. Esto permite que se desarrollen las capas antes de dorarse.
  • Mermeladas artesanales: Las mermeladas de frutas como fresa, naranja o albaricoque son el complemento perfecto para resaltar el sabor mantecoso de los croissants.
  • Mantequilla adicional: Aunque los croissants ya contienen mantequilla, servirlos con mantequilla fresca permite realzar aún más su textura suave y cremosa.
  • Chocolate caliente: Un chocolate espeso y caliente es el acompañamiento ideal, especialmente en días fríos o como parte de un desayuno reconfortante.
  • Café o té: Un café espresso o un té suave complementan perfectamente la textura ligera y hojaldrada de los croissants.
  • Frutas frescas: Sirve los croissants con frutas como fresas, arándanos o rodajas de kiwi para un contraste fresco y saludable.
  • Jamón y queso: Para una opción salada, rellena o sirve los croissants con jamón curado y queso suave. Es una opción perfecta para un brunch o una merienda.
  • Zumo de naranja natural: Un zumo fresco aporta un toque cítrico que equilibra la riqueza del croissant, completando un desayuno equilibrado.
  • Deja enfriar completamente antes de guardar: Los croissants calientes generan humedad en el almacenamiento, lo que afecta su textura crujiente. Déjalos enfriar antes de guardarlos.
  • Guárdalos en un recipiente hermético: Coloca los croissants en un recipiente de vidrio o plástico con tapa para mantener su frescura durante 1-2 días a temperatura ambiente.
  • Usa bolsas de papel para conservar la textura: Si prefieres mantenerlos ligeramente crujientes, guárdalos en una bolsa de papel en lugar de un recipiente sellado.
  • Congela para mayor duración: Los croissants se congelan muy bien. Envuelve cada uno en papel film y colócalos en una bolsa para congelador. Pueden durar hasta 2 meses congelados.
  • Recalienta correctamente: Para devolverles su textura crujiente, caliéntalos en el horno a 180 °C durante 5-8 minutos. Evita el microondas, ya que los hará blandos.
  • Evita guardarlos en la nevera: La refrigeración puede hacer que los croissants pierdan su textura hojaldrada y se vuelvan gomosos.
  • Rellénalos si pierden frescura: Si ya no están tan frescos, úsalos como base para croissants rellenos, ya sea con crema pastelera, queso o jamón, para darles nueva vida.

Preguntas Frecuentes (FAQs)

Sí, puedes preparar la masa y refrigerarla durante la noche o congelarla antes de dar forma a los croissants. Simplemente descongélala en la nevera antes de usarla.

 

La mantequilla es esencial para lograr la textura hojaldrada. Sin embargo, puedes usar alternativas veganas como margarina especial para hojaldre, aunque el sabor será diferente.

Si la masa se rompe, es probable que esté demasiado caliente o que no esté suficientemente reposada. Refrigérala durante 15-20 minutos antes de continuar trabajando con ella.

¡Sí! Puedes añadir rellenos dulces como chocolate o crema de almendra, o salados como queso o jamón, antes de enrollarlos y darles forma. Solo asegúrate de sellar bien los bordes para que no se escape el relleno.

  • Para descargar la receta, puede hacer clic en descargar en el archivo PDF a continuación.

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